Internacionales · 20/10/2022

Liz Truss renunció como primera ministra del Reino Unido tras 45 días en el cargo

La primera ministra británica Liz Truss anunció este jueves su dimisión tras apenas 45 días en el cargo, después que sus políticas económicas hundieron los mercados y minaron su autoridad.

Dada la situación, no puedo cumplir con el mandato para el cual fui elegida por el Partido Conservador”, declaró Truss frente a su residencia en el número 10 de Downing Street.

Con la renuncia de Truss, que se convirtió en el jefe del gobierno británico que menos tiempo pasó al mando del ejecutivo, el Partido Conservador se ve abocado a una nueva elección interna. Truss precisó que un nuevo proceso de votación será organizado de aquí al final de la próxima semana para elegir a su reemplazante.

Truss hizo el anuncio luego de sostener una reunión de último momento con Graham Brady, un legislador conservador de alto nivel que tiene la tarea de evaluar si el primer ministro aún cuenta con el apoyo de los miembros conservadores del Parlamento.

Solo un día antes, Truss había prometido permanecer en el poder y dijo que era “una luchadora y no alguien que abandona”.

Pero finalmente se resignó a dimitir este jueves, después de que se vio obligada a abandonar muchas de sus políticas económicas y mientras un número creciente de parlamentarios conservadores le pedían terminar con el caos.

La ira de los legisladores creció después de que una votación el miércoles por la noche sobre el fracking, la extracción del gas de esquisto que Truss quería reanudar a pesar de la oposición de muchos conservadores, produjo escenas caóticas en el Parlamento.

Dado que los conservadores tenían una gran mayoría parlamentaria, un llamado de la oposición para prohibir el fracking fue derrotado fácilmente. Pero hubo muestras de ira en la Cámara de los Comunes, con los responsables de la disciplina del partido conservador acusados de usar tácticas de mano dura para conseguir los votos.

La dramática renuncia de Truss se produjo después que la primera ministra despidiera a su jefe del Tesoro, Kwasi Kwarteng el viernes pasado, después de que el paquete económico que ambos dieron a conocer el 23 de septiembre asustó a los mercados financieros y desencadenó una crisis económica y política.

Los 45.000 millones de libras (50.000 millones de dólares) del plan en recortes de impuestos no financiados provocaron turbulencias en los mercados financieros, golpeando el valor de la libra y aumentando el costo de los préstamos del gobierno del Reino Unido. El Banco de Inglaterra se vio obligado a intervenir para evitar que la crisis se extendiera a la economía en general y pusiera en riesgo los fondos de pensiones.

*Infobae