El politólogo nicaragüense José Antonio Peraza, señaló la necesidad de un proceso de negociación con la dictadura de Daniel Ortega para alcanzar una salida política a la crisis que vive Nicaragua desde el 2018.
En entrevista con La Mesa Redonda, Peraza destacó la importancia de forzar una salida política mediante un proceso de negociación, subrayando que esto no implica reconocer a los dictadores ni perdonar sus crímenes.
“Nosotros tenemos que forzar una salida política y eso implica un proceso de negociación, y no es que yo esté reconociendo a los dictadores, ni les esté perdonando sus crímenes”, dijo el politólogo.
“Vamos a dialogar con la dictadura cuando llegue el momento, vamos a tener que ir a elecciones cuando se llegue el momento, y va a haber justicia, pero no va a ser inmediata, porque si no, lo que vamos ir a hacer son los tribunales populares antisandinista y eso ya lo vivimos”, añadió.
José Antonio Peraza menciona la importancia de dialogar y buscar acuerdos incluso con aquellos que tienen posturas divergentes, reconociendo que la unidad implica superar diferencias y buscar consensos. Además subrayó la necesidad de líderes responsables que prioricen el interés de Nicaragua por encima de las discrepancias internas.
“Yo sé que todos tenemos heridas, pero Nicaragua está por encima de todo eso”, aseveró.
La postura de Peraza se contrasta con las de otras organizaciones opositoras, como Conexión Nica USA, que considera que la lucha contra el régimen es incompatible con cualquier diálogo, negociación o elecciones mientras exista la dictadura Ortega-Murillo.
A su vez, el Espacio de Diálogo y Confluencia, señala que en las actuales condiciones no hay garantías para una salida pacífica y democrática, y que el cambio dependerá de la capacidad para cambiar la correlación de fuerzas. Sin embargo, se cuestiona cómo dialogar con un régimen que promueve la represión y el exilio.
Por otro lado, la Gran Confederación Opositora aboga por el desmantelamiento de la dictadura, incluyendo sus pilares represivos, y la reconstrucción de las instituciones del estado para recuperar la libertad y la democracia. Para ellos, ninguna negociación es posible mientras persista un régimen criminal.
Para los Nicaragüenses Libres, la unidad en la acción debe dirigirse hacia el derrocamiento de la dictadura y la fundación de una República democrática.
Mientras tanto, Monteverde enfatiza la necesidad de una salida cívica, rechazando la vía armada y apelando a la libertad, la justicia y el respeto a los derechos humanos.
Cabe destacar que Peraza es miembro de última organización, pero aclara que sus opiniones son personales. Además, asegura que “Monteverde tiene un serio problema” pues “hay grupos que quieren ser hegemónicos, hay sectores que quieren imponérseles a otros”.
“Monteverde está en un punto de tomar decisiones importantes y yo lo he dicho a nivel privado, si alguien no quiere estar conmigo o con otra persona, o con otro grupo, que lo diga y que cada quien siga su camino; y que se junten los que se quieran juntar”, comentó el politólogo.
Las distintas organizaciones opositoras nicaragüenses reflejan la complejidad del panorama político y la diversidad de enfoques sobre cómo alcanzar una salida democrática y pacífica en el país.
“Tenemos que ir a buscar un acuerdo porque ponerse de acuerdo con los que piensan lo mismo es fácil; lo difícil es ponerse de acuerdo con los que no piensan lo mismo”, concluye Peraza.