Destacados / Nacionales · 08/05/2024

Opositores alertan sobre reforma a Ley 800: “Dictadura sigue poniendo en riesgo el patrimonio territorial de todos los nicaragüenses”

Opositores nicaragüenses alertaron este miércoles 8 de mayo que la reforma a la Ley 800 “Ley del Régimen Jurídico del Gran Canal Interoceánico de Nicaragua y de Creación de la Autoridad del Gran Canal Interoceánico de Nicaragua” con la que el fallido proyecto pasa manos del Estado, es una alerta, pues la dictadura “sigue poniendo en riesgo el patrimonio territorial de todos los nicaragüenses”.

Este miércoles, los diputados orteguistas de facto en la Asamblea Nacional quitaron la concesión de construir y administrar el fallido proyecto del Canal Interoceánico a la empresa Hong Kong Nicaragua Canal Development (HKND) Group, del empresario chino Wang Jing.

La concesión a la empresa china fue anulada, pero los orteguistas reformaron la ley 800 y crearon la “Autoridad del Gran Canal Interoceánico de Nicaragua” cuya presidencia estará ejercida por el sancionado Oscar Mojica, ministro de Transporte de Infraestructura; el vicepresidente será un delegado del Presidente para la Costa Caribe; y el Secretario será Laureano Ortega Murillo, hijo de los dictadores de Nicaragua.

En su exposición de motivos, la dictadura explicó que, “tomando en consideración el siempre cambiante entorno nacional como internacional”, se hace necesario “adecuar algunas leyes para hacer frente a dichos cambios y mantener una gestión óptima dentro del Estado de Nicaragua”.

Reacciones de los opositores

El líder campesino y excarcelado político Medardo Mairena dijo que “la dictadura vendepatria sandinista tardó años en reconocer su fracaso al asociarse con un mafioso chino para supuestamente construir un Canal interoceánico en Nicaragua.

Los Ortega-Murillo se negaban a aceptar su irresponsabilidad, motivada por su propia ambición, al entregar el patrimonio nacional y las tierras de los campesinos a un proyecto que nunca tuvo ni pies ni cabeza, solamente cuando se ven amenazados por demandas de parte de las victimas estafadas por el prófugo Wang Jing, recurren apresuradamente a derogar la ley 840 y reformar la 800 para pretender que el proyecto continua vigente”, añadió.

Mairena exigió que también se derogue la Ley 800. “Conminamos a los Ortega-Murillo que saquen sus manos corruptas del manejo de nuestro patrimonio como nación y se abstengan de continuar dañando nuestros intereses afectando nuestro futuro”.

Proseguiremos exigiendo responsabilidades a todos los involucrados en la persecución contra centenas de campesinos que resultaron perjudicados por la aventura de quienes desgobiernan la patria”, concluyó.

Por su lado, el opositor y excarcelado político Juan Sebastián Chamorro expresó que el supuesto megaproyecto del Canal “siempre fue una estafa y una cortina de humo del régimen para apropiarse de tierras y propiedad privada de la franja del hipotético canal”.

Lo que siempre estuvo detrás de todo eso es el desmedido apetito de la dictadura por adueñarse de lo ajeno, particularmente de tierras de enorme valor económico… El megaproyecto del canal era simplemente la punta de lanza de ese esquema de depredación y de robo de tierras”, indicó.

Chamorro afirmó que Wang Jing al ser “un estafador vinculado con empresas controladas por el ejército chino” ya no les sirve al régimen; por lo tanto, va a seguir buscando socios.

Por esa razón, esa derogación de la ley 800, lejos de ser una celebración debe ser una alerta para los planes devastadores de la dictadura que sigue poniendo en riesgo el patrimonio territorial de todos los nicaragüenses”, finalizó.

El también opositor y excarcelado político Félix Maradiaga coincide con Chamorro al afirmar que “la dictadura persiste en su esquema depredador y de despojo territorial”.

Por esa razón, esa derogación de la ley 840, lejos de ser una celebración debe ser una alerta para los planes devastadores de la dictadura que sigue poniendo en riesgo el patrimonio territorial de todos los nicaragüenses”, coincidió.

El hecho de que la dictadura se vea forzada a admitir que la concesión a Wang Jing fue siempre una estafa, no nos debe detener. Los nicaragüenses de buena voluntad no podemos dejar de incidir, reclamar y trabajar por el fin definitivo de todo plan de la dictadura que pretenda despojar de sus tierras a las comunidades campesinas, indígenas, y todo legítimo dueño”, instó Maradiaga.

Mientras que la exguerrillera y excarcelada política Dora María Téllez recalcó que “la concesión canalera otorgada por Ortega a Wang Jing oficialmente muerta”.

Pero que “ahora, viene la nueva etapa, el endoso de todas las concesiones al gobierno chino. Entregar Nicaragua a precio de guate mojado. La operación vendepatria de los Ortega Murillo”, aseveró.