Destacados / Nacionales · 19/03/2024

“Un 60% del territorio está invadido. Estamos en vías de exterminio total”, denuncia indígena mayangna

Las comunidades indígenas mayangnas en la reserva de biósfera Bosawás al noreste de Nicaragua sufren invasión, desplazamientos forzosos, asesinatos y persecución desde hace años, sin que el Estado de Nicaragua actúe contra los llamados “colonos”.

Un líder mayangna que pidió el anonimato, dijo a La Mesa Redonda que el pueblo indígena sufre una “situación crítica” a causa de la continua colonización y con la cual están “en vías de exterminio total”.

Los territorios indígenas mayangnas están en una situación crítica, pero para nosotros esta situación no es de hoy, desde muchos años atrás han venido prácticas de discriminación y exclusión. Nuestros territorios están titulados; sin embargo, no hay respeto a la propiedad comunal. Porqué el Estado no respalda a los pueblos indígenas, tiene obligación de respaldar y tiene compromisos internacionales que no está cumpliendo”, reclamó el mayangna.

Hoy en día tenemos situaciones serias, un 60% del territorio está invadido, destrucción de tierras indígenas, de la diversidad biológica que hay, establecimiento de ganadería extensiva, concesiones mineras sin consultas”, añadió.

El denunciante señaló que actualmente las organizaciones, líderes y guardabosques que quieren defender sus derechos, son detenidos. “Los persiguen para destruirlos, entonces nos sentimos acorralados también, estamos en vías de exterminio total”, alertó.

Expuso que todos los territorios indígenas están en crisis, tanto los miskitos y mayangnas. Por ejemplo, en Sauni As, han asesinado a más de 30 personas y los culpables siguen libres; en cambio, “están cayendo presos los líderes y guardabosques”.

En este territorio Sauni As hay 24 comunidades y tres de ellas ya fueron desplazadas totalmente por los colonos, recalcó. “Hay territorios de 1.668 kilómetros cuadrados, un 60% está invadido. ¿Por qué no echan presos a los que están invadiendo?”, cuestionó.

El líder mayagna apunta que el “tráfico de tierras” viene del Pacífico, de ganaderos y funcionarios mineros que despalan hasta 500 manzanas de bosque.

No se puede trabajar con seguridad, estás en tu parcela y llegan a invadirte y hasta te matan”, dijo.

Asimismo, lamentó que organizaciones aliadas al régimen Ortega-Murillo avalen este proceso de invasión. “Es una colonización planificada, esa gente que apoyan están pagadas, no pueden decir nada”.

CorteIDH dictó medidas provisionales de protección a las comunidades mayangnas

En agosto de 2023, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) dictó medidas provisionales de protección a las comunidades mayangnas de Wilu y Musawas -esta última capital del territorio Sauni As- e instó al Estado de Nicaragua a garantizar la vida y seguridad de sus moradores.

Actualmente, las medidas de la Corte incluyen a las comunidades Miskitu de Klisnak, Wisconsin, Wiwinak, San Jerónimo, Francia Sirpi, Esperanza Río Coco, Esperanza Río Wawa, Santa Clara, Santa Fe y, con esta última ampliación, a las comunidades Mayangna de Wilú y Musawas.

El alto tribunal indicó que ha verificado un “recrudecimiento de la situación de riesgo” en la zona debido a la invasión de tierras por parte de “colonos”.

En ese sentido, la CorteIDH instó al Estado de Nicaragua a adoptar “las medidas suficientes y necesarias para proteger la vida e integridad” de los habitantes de Musawas y Wilu así como de las poblaciones desplazadas por actos de violencia, asegurar “la protección de los enseres, propiedades y cosechas” abandonadas y tomar “medidas de seguridad para su retorno”.

Pero, para el líder mayangna el proceso de saneamiento “no va a pasar” aunque llegue al poder otra persona.

Ningún gobierno ha estado pensando que los pueblos indígenas vivan bien. Pueden llegar otros Presidentes y van a hacer lo mismo mientras no nos entendamos”, sostuvo el denunciante, agregando que “solo el indio salva al indio”.

Nuestra preocupación es la territorialidad, autonomía, autodeterminación y la identidad del pueblo”, zanjó.