Nacionales · 19/01/2022

UNAB expresa “profunda preocupación” por la “falta de avances” en las gestiones de la OEA sobre crisis en Nicaragua

La Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) expresó este miércoles su “profunda preocupación” por la “falta de avances” en las gestiones de la Organización de Estados Americanos (OEA) y de los gobiernos del hemisferio a cerca de una salida democrática a la situación sociopolítica, económica y derechos humanos en Nicaragua.

“Tomamos nota del informe verbal presentado por el secretario general Luis Almagro al Consejo Permanente en su sesión ordinaria de esta mañana”, dijo la UNAB a través de un comunicado.

Este miércoles, Luis Almagro afirmó ante el Consejo Permanente de la OEA que procedieron a realizar gestiones correspondientes a través de comunicaciones dirigidas “al propio comandante presidente Daniel Ortega y de contactos institucionales al más alto nivel pertinente con la cancillería nicaragüense y sus dependencias”, pero que sin embargo, “no se concretaron, tampoco ha habido acciones unilaterales que permitieran señalar avances de ningún tipo en condiciones electorales, cooptación de poderes, situación de justicia, situación de presos políticos, libertad expresión y otros derechos y libertades fundamentales”, en Nicaragua.

“Definitivamente de las gestiones emprendidas, no han recibido el beneplácito para el envío de una misión de buenos oficios de alto nivel, tal como se ha solicitado por el consejo permanente en su resolución de diciembre pasado, es decir no se ha recibido respuesta formal del gobierno”, manifestó Almagro.

Al respecto, la UNAB criticó “la falta de voluntad del régimen Ortega-Murillo para el restablecimiento de las condiciones mínimas para encaminar al país a una solución de la crisis con la ayuda de la OEA y de los gobiernos del hemisferio”.

La organización señaló la “mayor necesidad de incrementar la presión con todas las herramientas disponibles a la OEA y a sus Estados Miembros, a fin de compensar la concentración de poder que ha impuesto la dictadura Ortega-Murillo y equiparar la correlación de fuerzas con la oposición”.

Además, reiteraron que “es necesario aplicar los mecanismos dispuestos en la Carta Democrática Interamericana dada la ruptura del orden democrático, incluyendo la suspensión de Nicaragua bajo el artículo 21, pero dando prioridad al desconocimiento del gobierno resultante de un proceso electoral ilegítimo bajo el artículo 19”.
Asimismo, exigió la liberación inmediata de las más de 170 personas presas políticas del país.

Pese a la falta de respuesta por parte de Ortega, la UNAB destacó que el tema de Nicaragua “fue parte de la agenda de reuniones presenciales que el secretario Antony Blinken sostuvo en Washington ayer con el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, y con el ministro argentino de Relaciones Exteriores, Santiago Cafiero”.

“A todos nuestros interlocutores transmitimos gratitud por el papel que la comunidad internacional ha jugado para aislar y acorralar a la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, el régimen que ha aplastado a sangre y fuego cualquier expresión cívica y que desmanteló la democracia en el país desde que regresó a la Presidencia en 2007, alterando profundamente el orden constitucional”, destacó.