Para el abogado y empresario Bosco Noguera, la reciente propuesta de reformas electorales presentada por el régimen de Daniel Ortega no cumple con las demandas de los nicaragüenses, de la OEA y de la comunidad internacional, por lo que ve que las elecciones del 7 de noviembre “difícilmente” cumpla con el estándar mínimo internacional para poder decir que “son viables”.
A esto se suma que, observa desde ya el “fraude electoral”, tomando en cuenta que la oposición del país no tiene limitados sus derechos civiles y políticos para enfrentarse a Ortega.
“Tristemente me atrevo a decir hoy que hay fraude electoral, el hecho de que no pueda haber libre movilización o derecho a reunirse pacíficamente, que la gente no pueda hacer campaña política de manera abierta, hay ciudadanos que han expresado su interés a la Presidencia que prácticamente están casa por cárcel, eso le resta legitimidad al proceso electoral”, declaró el abogado en un programa de Radio Corporación.
Noguera sostuvo que es absolutamente necesario que exista un mínimo de confianza en estas próximas elecciones de noviembre y para ello “un nuevo Consejo Supremo Electoral, observación nacional e internacional, y depuración del padrón electoral y cedulación”, son los puntos básicos para decir que habrá elecciones viables.
“Sino se da esa cedulación masiva, sino depuramos el padrón electoral, difícilmente cumplamos con el estándar mínimo internacional para poder decir que las elecciones son viables. Esto es algo que está en las recomendaciones de la OEA desde el año 2017”, manifestó.
“Un nuevo Consejo Supremo Electoral y un cambio en sus estructuras es un algo básico, el pueblo nicaragüense no va a confiar en una elección con las mismas reglas, con los mismos jueces, con la misma estructura; y de igual manera, la comunidad internacional está poniendo sus ojos sobre Nicaragua, específicamente con el tema electoral”, añadió.
Para Noguera, el régimen de Ortega “tiene la oportunidad para lavar esa mancha que existe en el punto de vista de la institucionalidad electoral” cambiando magistrados y cambiando la estructura del sistema electoral de Nicaragua.
“Tenemos que apostar porque se den cambios idóneos, con personas idóneas, personas de reconocida trayectoria y que no todo se base en escoger a personas por su militancia política. Es una demanda generalizada, queremos un nuevo Consejo Supremo Electoral”, apuntó.
Asimismo, cree que la presentación de la iniciativa de ley RENACER “viene a ser un factor importantísimo” en el tema electoral, pues a su juicio es un elemento de presión “para quienes impidan elecciones libres en Nicaragua”.