Al menos 50 sacerdotes nicaragüenses solicitaron refugio a Honduras y Costa Rica, debido a los constantes actos de represión y hostigamiento contra su labor en Nicaragua, según reporta el medio hondureño El Heraldo.
Monseñor José Antonio Canales, obispo de la Diócesis de Danlí, El Paraíso, afirmó a la prensa hondureña que los sacerdotes nicaragüenses rechazan y ha denunciado al régimen del dictador Daniel Ortega.
“Ellos nos han expresado estar en contra de las situaciones de injusticia e irrespeto de los derechos humanos en su país”, expresó Canales.
“Ya tenemos solicitudes de sacerdotes, que, siendo nicaragüenses, no pueden entrar a Nicaragua. Ya es una situación demencial”, reprochó el religioso, quien detalló que se trata de sacerdotes que por una y por otra, han salido del país y ahora ya no se les permite el ingreso.
De las 50 peticiones que han expresado los sacerdotes nicaragüenses, una ya fue hecha y entregada formalmente a la Diócesis de Danlí.
“Nosotros estamos disponibles para recibir a aquellos sacerdotes que en circunstancias extremas tengan que salir de Nicaragua. De esta forma puedan integrarse a la vida de la iglesia en El Paraíso”, agregó el obispo.
El religioso manifestó que aunque los sacerdotes no han sido maltratados físicamente, sí están afectados psicológicamente. “Considero que esto es peor que una patada, policías en las afueras de las parroquias, rodeando sus casas o recibiendo llamadas telefónicas para tratar de angustiarlos”, declaró.
El régimen de Ortega mantiene bajo arresto a al menos 10 sacerdotes, entre ellos monseñor Rolando Álvarez.