La dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo rechazó el martes el informe del Departamento de Estado de Estados Unidos sobre la situación de los derechos humanos en Nicaragua, y lo calificó de un “nuevo atropello y agresión”.
Washington documentó que el dictador Daniel Ortega, cerró durante el año pasado más de 300 organizaciones de la sociedad civil, despojó a 300 personas de su ciudadanía y mantiene en la cárcel a más de un centenar de presos políticos “en condiciones atroces”.
En un pronunciamiento suscrito por Ortega y Murillo, el régimen indicó “que ha conocido de un nuevo atropello y agresión a nuestra soberanía, desde un infame documento del Departamento de Estado de los Estados Unidos de Norteamérica, que se atribuye un rol, por nadie concedido, de guardián de los derechos humanos en el mundo”.
“Desconocemos absolutamente esta atribución que el imperio norteamericano se autoconcede, y reiteramos nuestras justas acusaciones y denuncias sobre los Gobiernos colonialistas y neocolonialistas de los Estados Unidos, por todos los crímenes cometidos contra Nicaragua en distintos momentos de nuestra historia”, señaló la dictadura.
En el documento, el régimen rechaza ese informe, “porque no somos colonia norteamericana”.
“Esa tendenciosa, parcializada e interesada exposición imperial, en continuo e insostenible afán de superioridad, a través de su ficcional, atrevido y ofensivo Destino Manifiesto, recuerda a los Estados Unidos todos sus crímenes cometidos en nombre de su glotonería imperial; crímenes y despropósitos, guerras y genocidios, que no pararemos de denunciar jamás”, reza el documento.
“Los Estados Unidos, el imperialismo norteamericano, no es nadie para acusar a un pueblo pequeño, donde han provocado crímenes de lesa humanidad”, prosiguió.
Ortega y Murillo calificaron a Estados Unidos como “los más bárbaros y salvajes violadores de todos los derechos humanos”.
“Sus informes son de ustedes, sobre ustedes y para ustedes. No los reconocemos. No pertenecemos a una cultura de dominados o colonizados”, agregaron.