Una parte del sector estudiantil de Nicaragua exigió equidad a los movimientos opositores agrupados en la Coalición Nacional para sumarse a ese grupo, que, entre otros objetivos, busca derrotar al régimen de Daniel Ortega en los comicios de 2021.
La agencia de noticias EFE, reporta que ese grupo de estudiantes no se ha sumado a la gran coalición “porque les han ofrecido un asiento junto con el Movimiento Campesino y ellos reclaman uno propio”.
El jueves pasado, tres partidos políticos y cuatro movimientos civiles firmaron los estatutos que regirán la Coalición Nacional, una parte de la juventud, aunque estuvo presente no firmó el documento.
“No se puede encasillar a todos los sectores representativos de abril de 2018 en un solo espacio, ¿por qué los partidos políticos tienen cuatro sillas, las organizaciones tres, y los campesinos y nosotros tendríamos (entre los dos) una”, dijo el dirigente estudiantil Jasson Salazar, en declaraciones a EFE.
Los jóvenes, al igual que los campesinos, fueron uno de los sectores sociales que lideraron las manifestaciones contra Ortega hace dos años.
Los estudiantes reclaman en principio que cada sector juvenil tenga una representación dentro la Coalición Nacional, es decir tres, no una, así como la tiene cada uno de los partidos políticos.
El sector estudiantil está compuesto por jóvenes que están dentro de la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, los de la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB), y otra parte no pertenece a ninguna de estas dos grandes agrupaciones, ambas firmantes de la Coalición Nacional.
La coalición opositora también está integrada por el Movimiento Campesino, Fuerza Democrática Nicaragüense (FDN), Partido Liberal Constitucionalista (PLC), Partido de Restauración Democrática (PRD), y el partido indígena Yatama.
La negativa de los tres sectores de estudiantes a unirse a la Coalición Nacional ha despertado dudas sobre la unidad de la oposición, lo cual fue rechazado por Salazar, quien dijo que “pedir derechos pareciera que fuera tabú”, y que todo se reduce a un asunto de “voluntad” de los miembros del principal movimiento opositor.
La también dirigente estudiantil Dolilfa Mora manifestó a EFE que “hay un adultismo instalado, y es parte de la cultura, muchos los adultos ven como amenazada su figura por jóvenes que pueden ser representativos, esa lógica a los partidos políticos no les conviene”.
Mora afirmó que, en las conversaciones para que los estudiantes ingresaran a la Coalición Nacional como movimientos independientes entre sí, los jóvenes recibieron un trato diferente respecto al resto de integrantes, por lo cual, decidieron no sumarse.
Los jóvenes tampoco descartan ingresar a la Coalición Nacional en el futuro, si ven cambios “que beneficien a Nicaragua”, de acuerdo con Salazar.
Los líderes estudiantiles afirmaron que, por ahora, continuarán organizándose en las universidades, barrios, escuelas y comunidades, para seguir reclamando el retorno de la democracia.