Estados Unidos anunció este jueves sanciones contra la dictadura cubana por la represión contra las masivas protestas del pasado 11 de julio en La Habana y en otros lugares de la isla. Las manifestaciones se dieron en un contexto de grave crisis económica y sanitaria.
Washington en concreto sancionó al alto funcionario de seguridad cubano Álvaro López Miera y a una brigada del Ministerio del Interior, informó el Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
Las sanciones se aplicaron en base a la Ley Global Magnitski sobre Responsabilidad de Derechos Humanos (Global Magnitsky Human Rights Accountability Act o Ley Magnitsky Act), una norma con la que la Justicia de EEUU puede acusar por corrupción y violaciones a los derechos humanos a ciudadanos extranjeros.
El Congreso la aprobó en 2012 y apuntó originalmente a funcionarios del régimen ruso que eran investigados por el crimen del abogado Serguei Magnistski en 2009, un militante que había denunciado la corrupción del Gobierno de Vladimir Putin.
Cuatro años después, Estados Unidos empezó a aplicar esa ley a nivel mundial, una norma que le permite sancionar a gobiernos que violen los derechos humanos, congelar activos en distintos lugares del mundo y prohibir la entrada a EEUU.
Además, la medida marca los primeros pasos concretos del presidente Joe Biden para presionar a la dictadura cubana, luego de denuncias de cientos de detenidos y desaparecidos tras las protestas.