Opinión / Ensayos · 22/02/2023

¿Estamos peor que ayer?

Análisis de la reciente entrevista brindada por el General en Retiro Humberto Ortega a «Oppenheimer Presenta» por CNN.

Por Haydee Castillo | 21 febrero de 2023

Analizando la comparecencia del General en Retiro Humberto Ortega en el programa de Andrés Oppenheimer puedo llegar a las siguientes reflexiones y conclusiones:

1.        Que nos quiere vender la idea de que la liberación de los 222 presas y presos políticos fue producto de intercambios, diálogos y acuerdos supuestamente “soberanos” del régimen de Ortega con el Gobierno de Estados Unidos.

2.        Que aplaude la excarcelación de las presas y presos porque pueden, según él, constituir pasos para reanudar el diálogo de Estados Unidos con el Régimen de Ortega. Y que semejante “paso trascedente “se dio producto de las relaciones que mantiene el régimen con Estados Unidos a través del Departamento de Estado, El Poder Ejecutivo y la Embajada de Estados Unidos en Nicaragua.

3.        En cuanto a la motivación del Régimen de Ortega para liberar a las presas y presos políticos, según la respuesta de Humberto Ortega, me queda claro que la Dictadura se encuentra en una situación económica vulnerable la que puede poner en peligro su permanencia en el poder. “Los fondos que ha recibido se han achicado y han comprimido la macro y micro economía. Y la única manera de seguir recibiendo los fondos es a través de un salida a la crisis”, expresó Humberto, más claro que el agua verdad?

4.        Que a pesar de los grandes actos llenos de flores para dar a creer al pueblo que tienen grandes aliados con quien han suscrito sendos acuerdos, éstos no le han resuelto la falta de solvencia económica. “Sus aliados China y Rusia no están en capacidad de desembolsar el dinero que él quisiera”, reafirmó su hermano Humberto.

5.        Que la Dictadura de Ortega no contaba con que Monseñor Rolando Álvarez se reusaría a ser desterrado, lo que provocó una actuación precipitada de su parte y otra violación a los derechos humanos al apresarlo sin un juicio previo. Situación que opacó completamente el supuesto “paso trascedente” de Ortega de excarcelar a las presas y presos políticos, lo que le está provocando altos costos políticos y puede detonar en una situación que debilite su permanencia en el poder.

6.        Lo más peligroso es que Humberto Ortega quiere vender la idea de que al excarcelar a los 222 presos/as políticos, hermanos nuestros, se puede hacer “borrón y cuenta nueva” y aceptar impunidad: “Se cierra la coyuntura de 2018 y se abre una nueva con los presos libres” asegura el entrevistado. Como si un acto como ese fuese suficiente para desechar la tan ansiada justicia y olvidar  el nepotismo, la corrupción, el Golpe de Estado a las instituciones democráticas, los crímenes, encarcelamiento, desplazamiento forzoso, la existencia de un ejército paralelo de paramilitares, en síntesis todo el abuso de poder de lo que ha sido objeto sistemáticamente el pueblo indefenso de Nicaragua por parte de esta Dictadura. 

7.        Y para resolver la actual crisis, el General Retirado plantea que ante la incapacidad tanto de la oposición como del Régimen de Ortega de encontrar una salida a la crisis, las elecciones de 2026 constituyen una oportunidad y un tiempo prudencial para que ambas fuerzas, como si fuesen simétricas, se preparen y mediante las mismas encontrar una salida a la crisis. Pero lo que Humberto Ortega olvida es  que su hermano, el Dictador ha sido incapaz de cumplir ni siquiera los acuerdos que suscribió con la Alianza Cívica en Marzo de 2019, que ha usurpado el poder mediante dos fraudes electorales de forma descarada en los últimos dos años, que denunció la Carta Democrática Interamericana y asaltó las oficinas de la Organización de Estados Americanos en Managua. Y por tanto quién puede ser tan ingenuo y creer que este Régimen de su propia voluntad cederá el poder mediante elecciones en 2026?

8.        El Ex Jefe y fundador del Ejército expresa que hoy estamos mejor que ayer porque ya no está ni la dictadura de Somoza ni está Reagan. Olvidando que hoy tenemos a otro Somoza en el poder en camino a otra dinastía. Pero peor, pues se da en un contexto en que el multilateralismo está en tal crisis que no es capaz de resolver ni siquiera la guerra impuesta por Rusia a Ucrania.

9.        Lo que si es cierto, según mi criterio, es que en este momento, a como están las fuerzas de la oposición de divididas, compitiendo entre ellas en vez de cooperar y atomizadas, sin una propuesta que genere esperanza y cercanía con la crisis cotidiana del pueblo, y sin un liderazgo visible y creíble, es imposible que el pueblo le vea como un opción. Aun cuando el Régimen actúa fuera de toda racionalidad, no se está siendo capaz de potenciar esos graves errores para dar un salto y convertirse en una alternativa de poder.

10.      La sociedad nicaragüense viene de una clase política que históricamente se ha alimentado nos solo de la corrupción y de pactos indecorosos, sino también de dividir al pueblo entre los “buenos y los malos” pertenecientes todos a partidos políticos que actúan como empresas familiares para ver quien obtiene las mejores ganancias. Esto ha hecho mella y nos pone en una situación donde cada nicaragüense debe optar por un caudillo, en el que “O está con él o está en contra de él” de donde devienen las dádivas y prebendas como premios a la sumisión.

11.      Será entonces el momento de buscar una mediación externa que procure el encuentro de las fuerzas opositoras para superar la desconfianza y lograr por fin un acuerdo de nación que permita encontrar una solución sostenida a la crisis?

12.      Lo anterior no significa que la Dictadura sea una mejor opción ni la única, pues con el Golpe de Estado dado a la institucionalidad, a la Constitución, a las leyes y a la convivencia entre nicaragüenses, es suficiente para considerarle aplazado tal y como el pueblo le ha evaluado en las dos últimas farsas electorales. 

13.      Los hombres y mujeres azules y blanco que hicieron germinar la Rebelión Ciudadana de Abril en toda su diversidad, tienen la responsabilidad ética y moral para que ésta, como dice el campesinado nicaragüense, no “se vaya en agua”.

14.      Esta es una oportunidad única para sentar las bases de un Estado de Derecho y una Democracia robusta que asegure la instauración de una paz duradera con bienestar, inclusión, justicia y no repetición. Es ahora o nunca que debemos conducir la carreta hacia ese cometido, y es una responsabilidad de cada ciudadano nicaragüense, de los liderazgos que basados en un acuerdo de nación pongan a Nicaragua en el centro de su actuar.

15.      La sangre derramada, tanto llanto de las madres e hijos, tantos duelos no resueltos, tantos traumas, tanta violencia vivida a través de la historia, tantos pactos, tanta pobreza, es suficiente razón para hacer una tregua, una reflexión profunda y una ofrenda a Nicaragua constituyendo una Alianza que conduzca a la paz que nunca hemos conocido.

Estamos peor que ayer pero podemos hacer mañana amanezca para siempre. Apuremos el paso.