El fray italiano Damián Muratori, se encuentra en riesgo de ser expulsado de Nicaragua, luego de acudir ayer lunes a una citatoria en la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) en Managua, tras hablar en su homilía del domingo pasado del obispo Rolando Álvarez, encarcelado por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Según medios locales, el religioso del Santuario Franciscano El Tepeyac, en San Rafael del Norte, Jinotega, salió hacia Managua para acudir a la cita, pero hasta el momento se desconoce el paradero del sacerdote.
Presuntamente, Muratori estaría retenido en la Dirección General de Migración y Extranjería.
Según varias personas de San Rafael del Norte la represalia se da luego que el religioso dijera en su homilía del domingo pasado: “Oremos también por Monseñor Álvarez que está en la cárcel, 26 años de cárcel, para que él sea valiente y nos enseñe a ser realmente nicaragüenses leales, coherentes y orgullosos de ser nicaragüenses”.
“¿Se fue monseñor Álvarez? ¿Por qué no se fue? ¡Porque no quiso!… Al final, 220 personas agarraron el avión y uno no lo agarra. ¿Tenía razón Monseñor Álvarez?… Se quedó y para mí, es un verdadero hombre con pantalón… Me echan preso, échenme preso…”, dijo Muratori, según la plataforma Agenda Propia.
Fray Damián llegó a Nicaragua el 14 de marzo de 1976 y estuvo como misionero en el municipio de Matiguás. Desde entonces, ha destacado en múltiples obras sociales, además de ser vice postulador de la causa de canonización de fray Odorico D’ Andrea, a quien los católicos llaman “el santito de San Rafael”.
Fray Damián tenía residencia permanente en Nicaragua, pero debía renovarla anualmente. Sin embargo, en mayo de 2021, la Dirección General de Migración y Extranjería le canceló la residencia y el religioso debe estar renovando su estadía en el país cada tres meses.