Aquella tarde, aquella tarde mi alma destrozada por la «autonomía» gobernada de una Universidad, que vio derramar sangre de hermanos.
Cuánta Valentía de mi salía, sentía fuego, arrechera, ganas de salir y matar a aquellos asesinos que no tenían piedad de hermanos desarmados. !Cuánta impotencia!, por las calles en la noche como la llorona, llorando por mis hermanos en este caso, llorando como cuando a uno se le muere un ser amado, si, un ser amado. Aquellos jóvenes, aquel futuro eran y son mis hermanos de la patria, heridos, heridos por hombres dementes sin piedad, por trastornado de guerra, creyendo que estaban en guerra.
¿Julio victorioso o Julio doloroso?, para quienes conocen los valores morales, el valor y respeto de la vida, saben que es Julio doloroso.
Acaso tus hermanos no duelen, duele, duele en mi alma el recuerdo de aquellas heridas en sus cabezas con armas de guerra, ¿cuál guerra?, la guerra de aquellos locos fanáticos, despersonalizados que atacaron aquel recinto universitario.
¿Julio victorioso o Julio doloroso? La historia se equivocó, pero aquellos que lucharon en aquel julio victorioso del 79 nunca existió, ni existirá igual era un Julio doloroso, con un propósito no bueno.
Acaso ver morir hermanos es victoria. ¿Qué victoria?, dementes.
Autora: anónima