Manuel Díaz, creador del blog Bacanalnica y experto en marketing digital, dijo que el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, ya no menciona en sus medios oficialistas el nombre del empresario chino Wang Jing, a quien hace dos días le quitaron la concesión para la construcción del fallido canal interoceánico en Nicaragua.
En entrevista con La Mesa Redonda,Díaz señaló que la dictadura “metió las patas” al involucrar a Wang Jing en el fallido proyecto, el cual nunca arrancó.
“No han dicho nada. Fíjate que igual que vos he estado monitoreando los medios del poder ciudadano para darme cuenta el spin (dicen los gringos) que le van a dar a esto, no sé cómo van a dorar esa píldora para sacar al comandante (Daniel Ortega) bien parado de eso, porque es un retroceso definitivamente; es aceptar que metieron las patas con el individuo este (Wang Jing)”, declaró Díaz, ayer jueves.
El pasado 8 de mayo, los diputados de facto en la Asamblea Nacional de Nicaragua, derogaron la Ley 840 y el “acuerdo marco de concesión” canalera a la empresa Hong Kong Nicaragua Development (HKND) propiedad de Wang Jing, quien hace 11 años recibió de manos de Daniel Ortega la concesión para el fallido Canal Interoceánico por 50 años y otros 50 prorrogables.
La derogación de la Ley 840 se dio dos días después que el diario La Prensa informara que Wang Jing resultó ser un estafador y que ahora estaría viviendo “una vida feliz” en Estados Unidos.
“Quitar a Wang Jing puede ser orientación del partido comunista”
Para Díaz, resulta evidente que el contrato con Wang Jing estaba vinculado estrechamente al partido comunista chino, lo que generó conflictos cuando Wang Jing cayó en desgracia ante el partido.
“Por mucho que nosotros tratemos de personalizarlo, ningún empresario grande, pequeño, famoso, no famoso que venga de China Continental, en realidad es independiente al partido comunista, ninguno”, sostuvo.
“Para mí fue evidente que ese contrato con realidad era un contrato con el partido comunista, el problema que Wang Jing, si bien en ese momento estaba bien con el partido, después le fue mal con el partido, hizo cosas y cayó en desgracia”, añadió.
Para Díaz, “quitar a Wang Jing puede ser incluso una orientación del partido (comunista), diciéndole ‘mira quítame a este porque vamos con este otro’”.
“Puede ser que venga ahora una negociación directa con otra empresa del partido comunista, puede ser que esta ley de 800 que todavía existe, que la reformaron para su composición hacerla más compacta, sea una estrategia para ver que más se piñatean”, valoró.
“Se le cayó el negocio” a Laureano Ortega
Díaz también lanzó críticas hacia Laureano Ortega, hijo de los dictadores, quien estuvo involucrado en el acuerdo con Wang Jing. Según Díaz, este episodio constituye otro fracaso para Laureano y una vergüenza para su familia.
“Lo más llamativo para mí, lo que más pesa en todo esto es, ver cuál va a ser esa excusa que le van a dar a su gente, quiero ver a la vieja arrimada (Rosario Murillo) dándole vueltas, haciendo contorsiones y tratando de con poemas y cosas y que ‘el sol que no decline’ y toda esa pendejada que siempre vive diciendo, ‘y era lo mejor para Nicaragua, porque ustedes saben que el pueblo son ustedes y somos nosotros, y entonces Sandino nos cobija y no sé qué, y Wang Jing era imperialista y lo sacamos, y el comandante una vez más nos salvó de este problema’. No le hallo la vuelta que le van a dar para que todo esto salgan bien parados”, comentó.
Además, “me da satisfacción que el hijo cantante Laureano, así como tantos hijos inútiles que tienen y que solo vergüenzas le traen, este pasa a ser uno más de la lista, porque este es un negocio que él cocinó, él trajo a Wang Jing, él vendió la idea y ahorita debe andar en malas con la familia porque se le cayó y los puso en vergüenza”, finalizó Díaz.
Wang Jing el “fantasma”
Cabe recordar que, el 14 de junio del 2013, Daniel Ortega se reunió con Wang Jing en Nicaragua, para firmar el acuerdo marco para la construcción del canal interoceánico, y en esa ocasión bromeó diciendo “Aquí está el fantasma”, sin saber que 11 años después eso es una realidad.
“Se encuentra con nosotros en carne y hueso, ya luego lo escucharemos hablar, nuestro Hermano Wang Jing… ¡aquí está el fantasma, en carne y hueso!”, proclamó Ortega.
Según los medios chinos, Xinwei Group, la empresa que dirige Wang Jing, fue declarada en quiebra el pasado mes de abril, casi tres años después de que, en junio de 2021, su cotización en la Bolsa de Valores de Shanghai fue suspendida debido a “movimientos financieros irregulares”, que habrían dejado una estafa de unos 31 mil millones de dólares, adicional al ocultamiento de enormes deudas de su empresa Xinwei Group.