Félix Maradiaga, miembro del Consejo Político de la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) demandó este jueves que el dinero que organismos internacionales como el FMI y el BCIE han otorgado a Nicaragua para los damnificados por los huracanes, sea auditado y vigilado por la ciudadanía para su buen uso, y evitar el uso político y proselitista del régimen Ortega-Murillo.
Maradiaga señaló que los huracanes Eta e Iota dejaron una “devastación enorme” en Nicaragua, además de pérdidas de vidas humanas. Pero que el daño material más serio es “el que han sufrido decenas de miles de familias vulnerables por el abandono histórico del Estado por la depredación ambiental”.
En ese sentido sostuvo que “es fundamental exigir que ese dinero que entrará a las arcas del Estado que es dinero del pueblo, sea sujeto a auditoría social y manejado con suma transparencia”.
Explicó que, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Interamericano de Desarrollo, han aprobado casi 600 millones de dólares colectivamente. “La mayoría de ese dinero, son préstamos que los nicaragüenses tendremos que pagar en algún momento; no son un regalo, van a ser parte de la deuda pública que ya ha alcanzado niveles históricos”, subrayó.
El dirigente opositor llamó a las instituciones nacionales e internacionales que administrarán estos fondos, a hacerlo “con gran responsabilidad y no ceder a los chantajes del régimen, porque la dictadura va a querer hacer un uso político de esos recursos”.
Maradiaga aclaró que el pueblo nicaragüense no se opone a que ese dinero llegue a Nicaragua, pero que este no se use de forma política partidaria y para proselitismo.
“La ayuda debe llegar a los damnificados sin ningún distingo político, respondiendo a sus necesidades más elementales e inmediatas. No podemos permitir que se continúe dando lo que hasta ahora ha sido una manipulación del dolor del pueblo, para ello se requiere de vigilancia ciudadana, de estar atentos de cómo se utilizan esos fondos y denunciar en todo momento cualquier tipo de malversación. ¡Basta ya de corrupción!”, concluyó.
El régimen Ortega-Murillo estimó el martes en 742 millones de dólares, un 5,93 % del Producto Interno Bruto (PIB) de Nicaragua, los daños causados por los huracanes Eta e Iota.