El Dr. Francisco Larios, economista y opositor al régimen en Nicaragua declaró este viernes en entrevista con La Mesa Redonda que los dictadores Daniel Ortega y Rosario son “un par de ancianos que cada vez dan más rastros de demencia”, y anota que observa el “fin de ciclo” por el “patético espectáculo” que dieron el pasado 19 de julio en una plaza de Managua.
“El régimen está vacío de ideas, de ideologías, de apoyo popular, corroído… Se siente como fin de ciclo porque uno puede ver atrás y entender la carencia de soporte ideológico y político que tienen ahora. Y ve que lo que va quedando es un par de personas mayores, un par de ancianos que cada vez dan más rastros de demencia”, dijo Larios. “No quiere decir esto que, las personas mayores que sufren de demencia uno vaya a maltratarlas, pero no son las personas que uno pone a gobernar un país”, continuó.
El también analista político reprochó el baile que Murillo y el Primer Ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves, protagonizaron con Ortega aplaudiendo.
“El espectáculo de un sujeto cacreco (Ortega), apenas capaz de mantenerse en pie, aplaudiendo sin ritmo, mientras la mujer (Murillo) se contorsiona alocadamente en una danza con un señor (Gonsalves) que en apariencia es el mandatario de más alto rango que llegó a la gran celebración del 14 aniversario de la llamada revolución, y ese gran dignatario viene de una Isla que está por ahí (…) Es patético, es como un espectáculo que te dice que eso casi no existe ya (…) Este extraño momento, es una ilustración de lo vacío que ha quedado el régimen. Ya no hay ahí presidentes de países cuyo nombre uno pueda acordarse, hay ausencia total de masas populares. Están bailando un señor que apenas se sostiene en pie, una señora que se contorsiona alocadamente con un señor de una isla que no se sabe dónde queda”, comentó Larios.
“Verlos actuar de esa manera me hace pensar también en un fin de ciclo porque a mí se me hace muy difícil concebir que en las condiciones en las que están, ellos realmente puedan mandar, puedan estar en control de todos los poderosos intereses que están alrededor de ellos. Me pregunto hasta qué punto manda uno, manda el otro”, añadió.
“ESTÁN LLEGANDO A SU FIN”
Larios asegura que la pareja de dictadores “está llegando a su fin”. Sin embargo, cuestiona en que “no sabemos es cómo reemplazarlos” ante la falta de una oposición “lo suficientemente grande y articulada”.
“Tienen que preguntarse sobre ‘el después’ porque cuando uno saca una pieza del sistema, sobre todo una pieza crucial como ‘el comandante’, se te puede venir abajo la casa, la construcción”, anotó.
“Yo veo que esta gente está llegando al fin y por otro lado veo que no hemos logrado consolidar un movimiento popular democrático combativo autónomo lo suficientemente grande y articulado como para que, seamos nosotros, si toca mañana quienes derroquemos a la dictadura y tomemos liderazgo de un proceso de democratización”, indicó.
En ese sentido, señala que en la política “los vacíos de llenan de alguna manera” y “si estos dos patéticos personajes desaparecen” los poderes fácticos tomarían su lugar.
¿POR QUÉ NO LOS HAN APARTADO DEL PODER?
Larios asegura que tanto como Estados Unidos, el Ejército y la “oligarquía” tienen “el poder de desplazarlos del poder” a Ortega y Murillo; pero que estos tienen temor “de lo que ocurra después”
“¿Por qué no los han apartado del poder? No es porque no se pueda, es muy fácil, Estados Unidos tiene el poder de desplazarlos del poder, el Ejército tiene el poder de desplazarlos del poder y la oligarquía tiene el poder de desplazarlos del poder; no los han desplazado del poder porque tienen miedo de lo que ocurra después, de la secuencia de hechos después”, dijo.
“Mañana desaparecen estos dos y entonces entra la incertidumbre total, y la pregunta ‘y ahora qué hacemos’ es la que ellos no han podido resolver”, aseveró.