Para el abogado nicaragüense Yader Morazán, especialista en administración de Justicia y Derechos Humanos, los últimos despidos en el Consejo Supremo de Justicia y la implosión en el FSLN, es algo que “iba a pasar tarde o temprano” en una institución donde “no se respeta la carrera judicial” y predomina el “canibalismo laboral”.
“Es un hecho que esto iba a pasar tarde o temprano. Y como decimos en el lenguaje popular ‘se están mordiendo entre ellos mismos’, los alacranes que han creado. Desgraciadamente en el Poder Judicial se ha creado una cultura y que se ha radicalizado a partir de abril de 2018, una cultura de canibalismo laboral. Ya no se toma en consideración el mérito profesional o académico que puede tener una persona para desempeñar un cargo, sino el mérito político”, dijo Morazán en entrevista con La Mesa Redonda.
“Actualmente lo que sucede es que, todo movimiento de cuestionamiento por mínimo que sea, es interpretado con un rigor porque la radicalización y la forma en cómo han venido comprometiendo a todos estos funcionarios lleva a unos niveles en que aquella persona que titubea es remocionado de su cargo. Ha venido pasando lo que sucede en todo el país. La indisciplina laboral se ha incrementado porque ya las personas que están ahí por pagar favores políticos, precisamente obedecen más a un lineamiento político, más allá de una misión institucional”, continuó.
Morazán, también ex funcionario del Poder Judicial, se refiere a Roberto Larios, vocero y director general del área de Comunicación de la Corte Suprema de Justicia, quien fue detenido por la Policía la noche del viernes 14 de octubre y llevadoa la Dirección de Auxilio Judicial, conocida como ‘El Chipote’.
La semana pasada también se supo sobre la destitución “por órdenes superiores” de Katia Jaentschke Acevedo y Ruth Tapia Roa, directora de relaciones internacionales y Protocolo de la CSJ, respectivamente. Ambas funcionarias fueron despedidas a inicio de octubre, y las órdenes vinieron directamente de El Carmen, reveló el medio Confidencial.
Asimismo, se conoce que Félix Adolfo Díaz, chofer de Roberto Larios fue citado por la Policía al Departamento de Homicidios “con el objetivo de entrevista”, según informó el portal Artículo 66.
Morazán afirmó que “salirte del Poder Judicial es como salirte de la mafia”, pues indica que esta institución es “el órgano de oro” del dictador Daniel Ortega con el cual “está sosteniendo su represión” mediante la persecución judicial a todos los opositores.
“Si renunciás sabés que tenés que o irte del país o vivir en la clandestinidad, no es que renunciás y te vas tranquilo para tu casa, no es así”, señaló el abogado que aseguró que dentro del Poder Judicial “hay diversidad de pensamientos y de acciones”.
“Hay funcionarios que creen que hay que dar la batalla desde adentro, existen, los que filtran información, los que no están de acuerdo y que se han incrementado más con la persecución a la Iglesia…”, anotó.
Según Morazán, “la radicalización” en el Poder Judicial “se dio a tan fuego lento”. “Los jueces no se dieron ni cuenta en qué momento fueron perdiendo el poder frente a la Policía, que no hacía caso a las órdenes de libertad u órdenes de captura y los jueces comenzaron a hacer el papel de ridículos y comenzaron a hacer reclamos”, declaró.