El diácono nicaragüense Milton José Martínez Blass de 48 años, será ordenado sacerdote mañana 11 de mayo en la Catedral Santa María de la Arquidiócesis de Miami, Estados Unidos, junto a otros tres religiosos de nacionalidades diferentes.
Milton Martínez nació el 17 de marzo de 1976 en Managua, en la familia formada por Guillermo Martínez Leyva y Miriam Del Socorro Blass. En 1988 cuando tenía 12 años se enfrentó a la posibilidad de ser reclutado por el Ejército sandinista, pero su madre no estaba dispuesta a entregar a su hijo y con valentía, decidió llevarlo junto a sus hermanos a Estados Unidos.
Según relata el artículo publicado en el sitio web de la Arquidiócesis de Miami, fue en esa ciudad donde Martínez comenzó a redescubrir su vocación religiosa.
Aunque desde joven había sentido una atracción hacia el sacerdocio, las circunstancias políticas en Nicaragua lo obligaron a posponer sus sueños, pues “el régimen sandinista de Nicaragua comenzó a obligar a los escolares a alistarse en el Ejército”.
La familia asistía a la parroquia de St. John Bosco. Sin embargo, acabados los estudios, Milton Martínez se muda de su vecindario y decide hacerse banquero. Dos décadas después retorna a su antiguo barrio y a su anterior parroquia y cuando estaba a punto de retirarse de la iglesia el párroco Juan Carlos Paguagua, le dio una palmada en el hombro y le dijo: “bienvenido a casa, hijo”.
“Eso me sorprendió y me quedé. Durante la homilía, sentí como si me estuviera hablando de tener coraje, fe en Dios, esperanza en Cristo. Acepté a la Iglesia por primera vez y, para mi sorpresa, la Iglesia me devolvió el abrazo”, relató.
Martínez se preparó para recibir el sacramento de la Confirmación en el 2013, fue catequista, y durante esos años el Padre Paguaga se convirtió en su director espiritual.
Posteriormente entró al St. John Vianney College Seminary y actualmente está culminando su cuarto año en el Seminario Regional St. Vincent De Paul.
A pesar de las dudas y preocupaciones iniciales de su madre, Martínez finalmente recibió su bendición y apoyo incondicional para seguir su vocación, y mañana, en una ceremonia, Martínez será ordenado sacerdote, marcando el comienzo de un nuevo capítulo en su vida dedicado al servicio de Dios y de su comunidad.
*Con información de Aciprensa