Yelba Asunción Aburto Medina originaria del municipio de Tisma en Masaya, denunció ante la Comisión Permanente de los Derechos Humanos (CPDH) la brutal agresión de la que fue víctima ella y su familia por parte de antimotines de la sancionada Policía Orteguista.
La joven relató que a la propiedad de su familia llegaron unas siete patrullas con al menos 50 oficiales para sacarlos puesto que paramilitares y policías quieren adueñarse del inmueble, agredieron a su padre Ángel José Aburto a quien luego secuestraron junto a su tío Francisco Aburto.
Yelba por auxiliar a su progenitor fue golpeada en diferentes partes de su cuerpo por los oficiales.
“Nos encontrábamos en la propiedad que pertenece a mi abuelo y que ellos se quieren coger. Los antimotines llegaron y nos comenzaron a atacar a nosotros, al ver que a mi padre lo estaban atacando yo entré en defensa de él, y uno de los antimotines me golpeo por detrás en la cabeza, nos montaron con fuerza en la patrulla, a mi padre lo estaban asfixiando, poniéndole la bota en la cara, le aflojaron los dientes, le pegaron en sus partes, y me dijeron que si yo gritaba lo iban a matar”, contó la joven.
“Son paramilitares y policías que se quieren coger la propiedad, sin ningún papel, sin nada se metieron a la fuerza a la propiedad a intentar quitarla, que nos saliéramos”, agregó. La joven aclaró que su abuelo tiene escritura legal sobre la propiedad.
Yelba llegó a la CPDH con su camisa ensangrentada, con su cabeza herida, y puntadas en su rostro.
El abogado Pablo Cuevas, asesor legal del organismo condenó el actuar de la Policía Orteguista y afirmó que la familia Aburto tiene escritura legal de la propiedad.
*Fotos: Boletín Ecológico