El régimen Ortega-Murillo a través del Ministerio del Trabajo (MITRAB) declaró como asueto remunerado solo para el municipio de Managua los días 1° y 10 de agosto, fecha en la que los capitalinos conmemoran a su santo patrono, pero que por la pandemia la Iglesia Católica suspendió las procesiones.
“Se da a conocer esta comunicación de la ministra del Trabajo, doctora Alba Luz Torres, declarando los días 1 y 10 de agosto del año en curso, asueto remunerado para todos los trabajadores de nuestra ciudad capital que celebramos virtualmente ahora cumpliendo con todas las normativas sanitarias, cuidándonos, queriéndonos, protegiendo la salud y la vida aquí en Managua”, anunció Rosario Murillo.
El 13 de julio pasado, el cardenal Leopoldo Brenes informó la suspensión de las festividades en honor a Santo Domingo de Guzmán, que tienen sus días cumbres el 1 y el 10 de agosto, debido a la pandemia del COVID-19.
Brenes, dijo que ante la presencia del COVID-19 en Nicaragua, como Iglesia, junto al papa Francisco y los obispos de la Conferencia Episcopal, “reafirmamos una vez más: la vida por encima de todo”.