El abogado nicaragüense Yader Morazán, especialista en administración de Justicia, enumeró en un hilo de tuits los abusos e irregularidades que cometieron el Instituto Nicaragüense de Telecomunicaciones y Correos (TELCOR), y la Policía Orteguista, en el marco del cierre y asalto a Radio Católica de Sébaco, ocurrida el lunes pasado por orden del régimen orteguista.
Sobre los señalamientos a la Policía, Morazán criticó que esta institución irrumpiera violentamente no solo en la radioemisora, sino que también lo hizo en dos dependencias ajenas al medio católico.
“Una cosa es ordenar cese de las operaciones de la Radio (que es muy cuestionable), y otra muy distinta irrumpir violentamente (hasta en otras dependencias ajenas a la radio), saquear, secuestrar pobladores en propiedad privada y limitar la libertad de quienes estaban encerrados. Para quienes conocemos ese lugar, sabemos que existen divisiones BIEN marcadas en cada una de las dependencias violentadas por la guardia de Ortega, como son: 1.- Colegio San Luis, Radio y 2.- Canal Católico de Sébaco y la 3.- Capilla Divino niño de Jesús de Praga”, escribió el abogado con una imagen satelital del lugar.
Agregó que “aun habiendo una orden de allanamiento (que no es el caso) o pretendiendo conseguirla posterioremente con el contubernio del sistema de in-justicia de Ortega a través de cnvalidaciones de allanamientos, esta no puede recaer en dependencias ajenas al lugar investigado (Radio)”.
LAS IRREGULARIDADES DE TELCOR
En el caso de TELCOR, dirigido por Nahima Díaz, hija de Francisco Díaz, jefe general de la Policía, y quien a su vez es consuegro de Daniel Ortega y Rosario Murillo, y hermana de Blanca Díaz quién está casada con Maurice Ortega; Morazán sostuvo que “amparó” el cierre de la radio de Sébaco, “utilizando el art. 82.2 de la Ley 200 ‘Ley de General de Telecomunicaciones y Servicios Postales’, misma que dice: Se consideran infracciones muy graves: 2) Utilizar el espectro de frecuencia radioeléctrica que no le haya sido asignada o para un uso distinto al autorizado”.
En esa línea, el abogado aclaró que la “sanción que establece la ley para dicha infracción es: CAPÍTULO II / DE LAS SANCIONES Art 85.- En el caso de los servicios de interés general y particular, las infracciones muy graves serán sancionadas con multa que oscilará entre los diez y veinte mil córdobas”.
“Esa era la primer medida disciplinaria, y como última opción, TELCOR sólo debía cancelar la licencia o permiso cuando previamente hubiera apercibido o sancionado al titular respectivo (radio), por lo menos en tres ocasiones según la ley (art. 70 del Reglamento de la ley 2000)”, anotó.
No obstante, el abogado añade que “aún, esa última decisión administrativa no era la última palabra, porque la ley aún permitía interponer un recurso de reposición ante la hija de Paco Díaz o atacarla de nulidad ante la Contraloría General de la República (Art. 56 de la ley 200 y Art. 71 de su reglamento)”.
Es decir, “la Radio tenía hasta 15 días para mostrar su desacuerdo no como lo hicieron, de forma violenta y la hija de Paco Díaz 15 días para resolver. Pero no se acabaría ahí, sino que apenas se agotaría la vía administrativa, para proceder la discusión a la vía judicial”, explicó.
PADRE URIEL VALLEJOS BAJO “SECUESTRO”
Por otro lado, Morazán subrayó que el padre Uriel Vallejos, párroco de la Iglesia Divina Misericordia en Sébaco se encuentra bajo el “secuestro” de la Policía.
“Retener a una persona en contra de su voluntad es #Secuestro. Delito que está penado con prisión de 3-6 años, y se agrava cuando es realizado por autoridad, funcionario o empleado público prevaliéndose de su cargo para ganar puntos (Art. 163 y 165 «c» Código Penal)”, apuntó.
El sacerdote pidió el martes que no lo dejen solo en la parroquia Divina Misericordia, que se mantiene ocupada por agentes policiales que ingresaron a la fuerza la noche del lunes con el fin de apropiarse de los equipos de la radio.
“Continuamos custodiado, acá estamos; sólo nos queda pedir fuerza al Señor. Gracias por sus oraciones. ¡No me dejen solo!. La virgen de Fátima nos está acompañando”, clamó el sacerdote en un tuit, que acompañó con una fotografía.
El religioso se encuentra junto a otras seis personas alimentándose solamente con pan, galletas, yogurt y agua.
El religioso aseguró que “hay muchos antimotines dentro de la capilla” Niño Jesús de Praga que acoge la parroquia, así como fuera y en el colegio San Luis Gonzaga.