Nacionales · 20/01/2022

Veintidós países condenaron la visita a Nicaragua de Mohsen Rezai

Veintidós países del continente americano expresaron ayer miércoles en la Organización de Estados Americanos (OEA) su condena por la presencia en Nicaragua del iraní Mohsen Rezai, uno de los imputados por la Justicia argentina por el atentado de 1994 contra la mutua judía AMIA de Buenos Aires.

Estos países expresaron su condena en una declaración, una fórmula poco comprometedora y de gran tradición en la OEA que fue impulsada por Argentina y Estados Unidos.

En el texto, los veintidós países expresaron su apoyo a Argentina para que “se haga Justicia” en el ataque contra la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) el 18 de julio de 1994, que dejó 85 muertos y sigue impune.

Condenaron la presencia en el acto de “toma de posesión” de Daniel Ortega de Rezai, actual vicepresidente de Asuntos Económicos de Irán, y consideraron que supone una “afrenta a la Justicia argentina y a las víctimas del atentado de la AMIA”.

Asimismo, instaron a las autoridades nicaragüenses y a todos los miembros del sistema interamericano a actuar “de manera apropiada” en relación con las alertas rojas de Interpol sobre el atentado.

Sobre Rezai pesa una alerta roja de la Interpol por el ataque de AMIA y el Gobierno de Argentina ha cuestionado que la Interpol no lo detuviera cuando estuvo en Nicaragua.

La declaración fue leída durante una reunión del Consejo Permanente de la OEA por la representante argentina Cecilia Villagra.

Recibió el respaldo de 22 de los 34 países que son miembros activos del organismo: Antigua y Barbuda, Argentina, Barbados, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, EE.UU., Granada, Guatemala, Honduras, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Santa Lucía, Trinidad y Tobago, Venezuela y Uruguay.

RESPUESTA DEL RÉGIMEN DE ORTEGA

Sin embargo, el representante del régimen ante la OEA, Arturo McFields, rechazó la declaración y defendió que Nicaragua puede invitar a quien quiera porque es una nación “soberana”, y goza del derecho a la autodeterminación de los pueblos.

Nicaragua está en libertad de invitar a su país a quien desee y si esa persona llega con una buena actitud, siempre tendrá las puertas abiertas”, manifestó.