Opinión / Ensayos · 25/03/2024

Viacrucis por Nicaragua

A la gente exiliada opositora nicaragüenses

El terror del imperio romano,

los herodianos y los sumos sacerdotes.

A más de dos mil años se encarnó

en Rosario, Daniel y sus delincuentes

asesinos, que no dejan celebrar al pueblo

creyente sus tradiciones de Semana Santa.

Por ello, las y los opositores en Costa Rica,

se unen a celebrar el viacrucis y se canta

las canciones de retorno a la tierra Santa

como es Nicaragua que ahora espanta

por estar sometida por la cruel tiranía

y se recuerda a los muertos asesinados

por la brutal represión como Santos.

En los altares que son estaciones

del Viacrucis realizados por diferentes

organizaciones de exiliadas y exiliados,

hay fotos de los asesinados, mutilados,

de las y los presos políticos encarcelados.

En cada estación los sacerdotes desterrados,

exiliados y despatriados dirigen la reflexión,

acompañados por las y los exiliados.

Haciendo analogías del calvario de Cristo

que le tocó sufrir en la calle de la amargura

cargando la cruz cuesta arriba al Gólgota.

Subir la colina con una cruz acuesta era dura,

así es el exilio provocado por la dictadura.

En los altares de las estaciones había

mantas como sigue: “El exilio no es rendición

seguimos en resistencia para transformar

a Nicaragua” Un bello mensaje de redención.

“Por una Nicaragua libre de Ortega y su gente

unidos en el exilio estamos presente”

Una exclamación del corazón que se siente.

Y la última que se transcribe es una suplica

de recordatorio de lo vivido por la Sagrada

Familia por la persecución de Herodes:

“Santísima Virgen, viviste la misma historia

de miedo e incertidumbre que vivimos

los nicaragüenses. Bendícenos y mantén

viva la Esperanza de retornar a nuestra

patria en Libertad, Justicia y Democracia”

Parafraseando la biblia de los exiliados.

de las exiliadas en suelo ajeno y fraterno.

“El cielo y la tierra pasarán más la esperanza

de retornar a la Nicaragua libre no pasará”

En este mensaje Jesús de Nazaret advierte

que el orteguismo de terror no durará

para siempre, porque será una nueva Nicaragua

con nuevo cielo, tierra y abundancia de agua,

para las cosechas del campesinos y campesinas:

sea mestizo, indígena o afrodescendiente…

La iglesia celebraba hasta la décima cuarta

estación, pero siempre que hay crucifixión,

existe resurrección y esta es la décima quinta

estación donde los poderes son vencidos,

por la resurrección de Cristo, el Señor,

que al final libera a los exiliados sufridos.

Octava Estación.

Jesús consuelas a las mujeres,

es una consolación reciproca porque el texto

asegura: “Y le seguía gran multitud del pueblo,

y de mujeres que lloraban y hacían

lamentaciones por él” Eso es alzar el vuelo.

y sacando energía: “Jesús, vuelto hacia ellas,

les dijo: Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí,

sino llorad por nosotras mismas y por nuestros

hijos” Es una solidaridad mutua y los rostros

compungidos del sufrimiento cambian.

A más de dos mil años es el mismo mensaje

a las madres de abril y madres nicaragüenses.

El Viacrucis terminará y no más impunidad,

los asesinos llevados a la justicia y la verdad.

Javier Tórrez Bermúdez

23 de marzo de 2024

Iglesia de Coronado, San José, Costa Rica.