El Gobierno de Costa Rica expresó este lunes su consternación por el bombardeo ocurrido el domingo en un campo de refugiados en Rafah, insistió en la urgencia del alto al fuego y abogó por una investigación profunda de los hechos.
“Reiteramos una vez más el llamado a un alto al fuego inmediato, a la liberación incondicional e inmediata de los rehenes, y al respeto y acatamiento de las normas y principios del Derecho Internacional, especialmente el Derecho Internacional Humanitario, así como a las resoluciones relevantes del Consejo de Seguridad y a todas las medidas precautorias dictadas por la Corte Internacional de Justicia”, dijo el Gobierno costarricense en un comunicado.
“Costa Rica ha recibido con consternación la noticia del bombardeo sobre un campo de refugiados en Rafah, que ha causado la muerte de civiles inocentes, incluidos mujeres y niños, además de múltiples heridos. Esto suma mayor sufrimiento a una población varias veces desplazada, carente de las condiciones básicas de sobrevivencia por meses, que se encontraba en el último lugar donde se les había prometido refugio seguro”, añade el texto.
Además, Costa Rica espera “una investigación profunda y objetiva de este hecho con la correspondiente rendición de cuentas”.
Al menos 45 personas murieron en un ataque israelí la noche del domingo en un campo de desplazados en una “zona segura” en el barrio de Tal al Sultan, en el noroeste de Rafah, donde había cientos de personas en un campamento improvisado que Israel aún no había ordenado evacuar.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, calificó el ataque de “trágico error”. Según las autoridades israelíes, el incidente se está investigando y el objetivo del ataque era una instalación de Hamás en la que efectivamente fueron eliminados dos supuestos comandantes islamistas.
El ataque se produjo tres días después de que la Corte Internacional de Justicia ordenara el fin de la ofensiva militar del Ejército israelí en esa ciudad del extremo sur de la Franja de Gaza, ante el riesgo de genocidio.