El nicaragüense William González Guevara, periodista cultural del diario español ABC de España, habló con La Mesa Redonda sobre su investigación llamada “La mayor falsificación de la historia en la poesía” que revela que una red de falsificadores vendió supuestos manuscritos del poeta Rubén Darío a las universidades norteamericanas de Harvard y Arizona, cuya autenticidad no se sostiene.
González Guevara nacido en Managua, pero que emigró a España a la edad de 11 años junto a su madre y hermanas, mencionó que ya hubo una reacción del régimen de Daniel Ortega, solicitando explicaciones a ABC por la investigación.
“Quiero que sepan todos los que han leído la investigación, o que se han interesado por esta investigación que ha habido una respuesta del gobierno de Daniel Ortega, que lo sepan de primera mano, el gobierno de Daniel Ortega ha reaccionado a través del señor (Jorge Eduardo) Arellano, y a través de nada más y nada menos que del embajador de Nicaragua en España”, reveló el escritor.
“Ellos han pedido explicaciones a nuestro periódico ABC, porque se supone que ‘yo he insultado a todos los nicaragüenses que están en España con ese investigación’. Yo la verdad quiero que los lectores me digan, porque yo he recibido elogios de la Real Academia Española de la Lengua, de grandes académicos que pertenecen además a la RAE, de catedráticos, de profesores, de alumnos de periodismo, de periodistas de la competencia”, añadió.
González Guevara destaca la importancia de conocer la verdad sobre los manuscritos y la verdadera dimensión del creador, Rubén Darío, sin prejuicios, pues en el ámbito académico se ha dado más importancia al tema de la homosexualidad del poeta nicaragüense, en lugar de abordar la falsificación.
Por otro lado, González Guevara se mostró sorprendido por cómo dos prestigiosas universidades pudieron ser engañadas, y cuestiona por qué no se consultó directamente a las nietas del secretario de Rubén Darío para obtener respuestas.
LA INVESTIGACIÓN DE ABC
La investigación revela que 900 supuestos escritos del poeta nicaragüense Rubén Darío, fueron adquiridos por las instituciones académicas estadounidenses por significativas sumas de dinero. Los falsificadores lograron engañar a expertos y autoridades universitarias, aprovechando la falta de rigor en los procesos de autenticación y el deseo de las universidades de adquirir piezas valiosas para sus colecciones.
La transacción, cuyo precio exacto aún permanece en la oscuridad, se estima que superó los 200.000 dólares, según información a la que ha tenido acceso ABC Cultural.
El artículo señala que la red de tráfico de manuscritos darianos está liderada por Raúl Gerardo Bermúdez Balladares, un arquitecto de 45 años, quien se habría hecho pasar como nieto del señor D. Alejandro Bermúdez Núñez (secretario de Darío), según afirma la Casa de subastas ‘El remate’ de Madrid, España.
El llamado ‘Lote Bermúdez’ incluye documentos de la etapa diplomática del poeta: cartas a Zelaya (1908-1909), cartas familiares a Francisca Sánchez, recibos, trescientos folios varios de su obra poética con transcripciones de poemas supuestamente firmados y numerados, una versión en inglés de ‘Sonatina’ y unas polémicas cartas íntimas de Darío al poeta mexicano Amado Nervo, entre otros.
“UNA INVESTIGACIÓN INFERNAL”
González Guevara dijo a La Mesa Redonda que para él fue “una investigación infernal”, que comenzó por un “susurro” de su profesor de literatura hispanoamericana, quien durante una clase comentó que las universidades de Harvard y Arizona “tienen documentos de dudosa autenticidad”.
“Yo levanté la mano y le dije ‘me está diciendo usted que Arizona y Harvard tienen unos manuscritos de Darío que podrían ser falsos y hacen pasar por verdaderos’ y su respuesta fue un ‘sí’ rotundo. Y dije, esto no puede ser, lo primero que hice fue empezar a investigar y vi que el ‘gran fraude de Arizona’ como lo denominaron en su momento, se produjo en el año 2012 en Nicaragua por la homosexualidad de Darío, porque en el lote Bermúdez había unas cartas íntimas entre Amado Nervo, poeta mexicano y Rubén Darío y eso fue el detonante a un enfrentamiento en entre una postura española y una postura nicaragüense de cuando existía La Academia Nicaragüense de la Lengua. Se montó ahí un revuelo de 2012 que acabó más o menos en 2016, pero al final nadie comprobó que si esos manuscritos eran verdaderos, eran falsos, todo se quedó en el aire”, relató.
El escritor nicaragüense señala que su investigación se centró además en la figura del presunto falsificador Raúl Gerardo Bermúdez Valladares, “yo me comunico con él, le pido explicaciones, no responde”.
“También me llamó la atención la postura de Harvard, estamos hablando de la universidad más importante del mundo. Por qué Harvard ignoró la historia familiar o el pronunciamiento de las nietas del que fue secretario de Darío, no lo entendíamos. Por qué Arizona pasó por alto la batalla académica que se produjo en Nicaragua en su momento, por qué no le hizo caso al documento oficial que sacó la Academia Nicaragüense de la Lengua, es que había tantas cosas que no encajaban y entonces yo empecé a investigar”, continuó González Guevara.
“Tenemos los correos electrónicos del presunto falsificador, conseguimos el peritaje oficial que nunca vio la Academia Nicaragüense de la Lengua y que siempre pidió, nosotros en ABC lo hicimos público el peritaje oficial. Y además le contamos a los lectores cómo esos manuscritos que se supone que son de Darío pasaron por la Universidad Complutense de Madrid, luego por una subasta y al final acabaron en Arizona, o sea es una auténtica novela”, declaró.
RESPUESTA DE HARVARD
El periodista instó a los lectores a estar atentos a la respuesta de Harvard sobre este asunto, subrayando la importancia para los nicaragüenses de conocer la verdad sobre los manuscritos de Rubén Darío.
“Estamos en contacto con Harvard y con Arizona, además seguramente este fin de semana haremos público en ABC la respuesta definitiva de Harvard a este asunto. Yo le recomiendo a toda la gente que ha seguido el tema que es importante que lean esa respuesta de Harvard, porque como nicaragüenses nos debería interesar, porque es Rubén Darío; y sobre todo qué postura ha adoptado Harvard ante un lote que podría ser falso de Rubén Darío”, contó.
González Guevara reiteró en la importancia de entender la verdadera dimensión del legado de Rubén Darío, sin prejuicios.
“Se cometieron varios errores en su momento, entiendo que el mundo académico se centró en lo que se centró, sacamos un artículo de reacciones y comentaba Gioconda Belli –por ejemplo–, que el hecho de que la postura nicaragüense en su momento se haya tirado más por el tema de la homosexualidad y no por la red de falsificadores que podría existir”, mencionó.
“Nosotros hemos conseguido primero algo que nunca vio la Academia Nicaragüense que es el peritaje, que dice que esos documentos son auténticos, un peritaje erróneo según los expertos en Darío. Si solo se ha comprobado papel y tinta que son de época; sin embargo, se ha pasado por alto la caligrafía de Darío. A mí me ha chocado bastante porque cómo se puede engañar a dos de las universidades más importantes del mundo de esta manera. Y peor aún por qué se ignoró la respuesta que dieron en su momento las nietas del que fue secretario de Rubén Darío”, añadió.
El escritor subrayó que las nietas del que fue secretario de Rubén Darío comentaron en su momento que ya se sabía de la figura de Bermúdez Valladares (supuesto falsificar), asegurando que es su “primo en segundo grado” y que “era una película que se había montado él para sacar dinero”.
Gonzalez Guevara finaliza alertando que ABC también encontró ventas de estos manuscritos a particulares y a otras instituciones que rondan de los 20.000 a los 7.000 dólares, “es decir estamos hablando que hay manuscritos de Rubén Darío que podrían ser falsos regados por el mundo”.