Presidente de Costa Rica niega ataques a la prensa y pide repartir la carga migratoria

El presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, pidió apoyo exterior para repartir la carga económica que supone el aumento de la migración a su país y negó que esté atacando a la prensa como han criticado organizaciones profesionales.

Costa Rica siempre ha tenido los brazos abiertos a la inmigración por motivos económicos pero sobre todo para los refugiados. Lo que está pasando es que se les fue la mano a algunas personas que lo que quieren es inmigrar por razones económicas y utilizaron la generosidad de nuestro sistema de refugiados para hacerse pasar por perseguidos por razones políticas, de religión, orientación sexual u otras”, señaló Chaves en una entrevista con EFE en Davos.

Lo que decimos es que esa carga de la migración (…) se está haciendo muy pesada para un país que está ajustando su macroeconomía y que a los países emisores de esos migrantes les corresponde contribuir al gasto que el pueblo costarricense está haciendo”, añadió el presidente.

Subrayó que “solo los migrantes económicos nos cuestan en salud, educación y seguridad entre 200 y 300 millones de dólares al año a un país pequeño como el nuestro. Seguiremos siendo generosos pero estamos pidiendo que cada palo aguante su vela”.

ATAQUES A LA PRENSA

Chaves rechazo que haya atacado a la prensa, como le acusan organizaciones gremiales, y defendió su “derecho a refutar lo que consideró “mentiras” por parte de tres medios de comunicación.

Yo no me meto con periodistas, es que les corrijo las mentiras que se dedican a decir por razones que mi pueblo conoce, que es avanzar intereses que no son los de la mayoría”, comentó.

Chaves tildó el lunes pasado de “sicarios políticos” a algunos periodistas por supuestamente “atacar” a su ministra de Salud, en medio de una polémica por presuntos pagos de la funcionaria a un trol para desprestigiar en redes sociales a periodistas del medio CRHoy y a diputados de oposición.

El Colegio de Periodistas de Costa Rica ha criticado las ofensas y la intolerancia hacia la prensa por parte del mandatario.

*EFE