El dirigente político opositor Héctor Mairena, miembro del partido UNAMOS e integrante de la Concertación Democrática Nicaragüense-Monteverde, lamentó este lunes la reciente salida de Alexa Zamora y Grettel Campbell, quienes la semana anterior presentaron sus renuncias, aduciendo “la falta de transparencia y participación en los procesos de toma de decisión”.
Zamora y Campbell se suman a la separación del también opositor y excarcelado político Alex Hernández, quien en el 30 de enero pasado anunció su retiro de Monteverde por “incompatibilidad de visiones de lucha”.
Al respecto, Mairena contó que en enero pasado se tomaron “decisiones muy importantes” durante una reunión plenaria en Washington, que tuvieron que ver sobre el cambio de nombre “Monteverde” a “Concertación Democrática Nicaragüense” y la adhesión de más organizaciones y personas.
“Este tránsito no es fácil, es complejo, plantea desafíos, pero por sobre todas las cosas, pone a prueba la voluntad política de quienes estamos allí y de las organizaciones que pertenecemos, por construir este espacio de la Concertación Democrática”, dijo Mairena a La Mesa Redonda.
Agregó que en la reunión plenaria “se acordó una estrategia y un plan general de acción” y que hay quienes “o no han terminado de comprender las dificultades que hay o se les dificulta convivir en un espacio en el que hay personas que piensan diferente”.
“Entonces, ya ha habido antes algunas separaciones, pero la absoluta mayoría, más de 50 personas, nos mantenemos allí”, afirmó.
En su carta de renuncia, Alexa Zamora, afirma que ha “observado con creciente preocupación algunas prácticas dentro de nuestro espacio que me han llevado a reevaluar mi participación. Específicamente, me refiero a la falta de transparencia y participación en los procesos de toma de decisión, la ambigüedad en la definición de roles para los participantes y la falta de claridad en la ejecución de nuestros procesos, objetivos y estrategias”.
Zamora añadió que para que Monteverde “sea verdaderamente efectivo y representativo, es crucial que se adopten prácticas que promuevan la transparencia, la claridad y la participación activa de todos sus miembros”.
Por su lado, Grettel Campbell, dijo en su carta que su decisión de renunciar a Monteverde “no ha sido tomada a la ligera y se fundamenta en varias consideraciones importantes relacionadas con el actual funcionamiento de este espacio de diálogo y acción”.
Campbell apuntó que “existe una dificultad inherente en el proceso de toma de decisiones que no siempre permite que los aportes de todos los miembros sean debidamente considerados”.
En ese sentido, Mairena declaró: “Lamento decir que ninguno de esos planteamientos ni de Alexa ni de Grettel fueron hechos en el espacio antes de hacerlos públicos, ninguno”.
“La presencia de Grettel en Monteverde ha sido intermitente, ella ha promovido un espacio; y en el caso de Alexa, nunca supimos de esas inconformidades. Repito, hay personas que se les hace muy difícil convivir en un espacio que es complejo, que hay debate; pero la información todos la manejamos, todos estamos en algunas de las comisiones que existen, todos participamos en los plenarios virtuales, participamos y somos convocados a plenarios virtuales y presenciales”, expresó.
“Yo desconozco los señalamientos –que no comparto- que ellas hacen sobre esa supuesta falta de transparencia, no la entiendo, pero lamento que se hayan ido”, continuó.
“PLURALIDAD DE ORÍGENES”
Mairena destacó que “el gran activo” de la Concertación Democrática Nicaragüense-Monteverde “es la pluralidad de orígenes, de pensamientos”, con la cual rechazó una vez más que el espacio esté dirigido por la izquierda o por el general en retiro Humberto Ortega, hermano del dictador Daniel Ortega.
“Participamos ahí, bajo la premisa de que el problema principal en Nicaragua no es ideológico, ni es izquierda, derecha; es democracia (vs) dictadura. Si estamos de acuerdo en eso, podemos trabajar como en efecto lo estamos haciendo, primero para salir de Daniel Ortega y de Rosario Murillo y segundo para lograr una transición democrática en Nicaragua”, recalcó.